Maybelline Matte Ink

Bueno, más que favorito, favoritos.Y es que desde que descubrí los Matte Ink de Maybelline, sí, se han vuelto un básico en mi vida y un imprescindible. 

El primero que conseguí fue gracias al Trendsetter de Maybelline, no conseguí nada más, y desde entonces se desato la locura. De momento sólo tengo cuatro, digo de momento porque no descarto el hacerme con más.

Nunca he sido de llevar pintalabios uno porque me sentía rara y pensaba que la gente me miraba sólo por llevar los labios pintados (menos mal que esto se me pasó y ya me da igual) y dos porque no había salido por la puerta y ya me lo había comido o pasado la mano para retirarlo. Normalmente solía suceder más lo de pasar la mano ya que sentía que llevaba algo que no debía estar, como pesadez y tirantez en los labios.

Por suerte con la edad, y que los tiempos van cambiando, y que eso la edad nos ayuda a estar más seguras de nosotras mismas, empecé a maquillarme más y a pasar de sólo maquillaje de fin de semana, ocasiones especiales o si salgo de fiesta a algo más diario. Sí que tengo que decir que noto como algunas madres se me quedan mirando cuando dejo al niño en el cole y lo mejor es indiferencia total (gracias madurez) a mí me gusta y me siento cómoda maquillada y más desde que por fin puedo salir de casa con los labios intactos.

Es lo que os venía a contar de los labiales de Maybelline después de todo este tostón. Estos labiales líquidos son la maravilla del mundo ya que tras aplicarlo duran y duran y duran (como las pilas Duracel), doy fe de ello en los tonos claros.

Los tres tonos rosas que tengo 05 Loyalist, 10 Dreamer y 15 Lover, este último es el labial perfecto por excelencia, una vez que los aplicas y se secan duran incluso después de comer y beber. No aguantan comidas muy grasosas, pero lo que es una jornada de mañana con su cafetito y su pinchín aguanta bien (en mi caso desde las 8 de la mañana hasta las 14:30 que llego a casa), quizás un pelín el del labio inferior se va un poco más pero de manera sutil.

En cambio el 45 Escapist, es un tono tan intenso de morado que casi parece negro cuando lo aplicas en el labio. Primero está que ponerlo es muy complicado y queda a parches por lo que hay que ir colocandolo en el labio sin arrastrar por lo que tarda más en secar y después se va como a parches y queda horrible. Para eliminarlo se va sin ningún problema con el agua micelar de Garnier.

A algunas chicas las he oído, mejor dicho leído, que resecan mucho los labios. A ver son mates y de larga duración lógico que sequen los labios. En mi caso los tengo muy secos y por lo general en invierno si no los cuido bien se me tienden a agrietar, despellejar e incluso sangrar. Hay está el caso, hay que cuidar bien los labios igual que el resto del rostro, desde que les dedico más tiempo de un par de años a este tiempo no se me han vuelto a resecar. Así que por las noches lo que hago antes de acostarme es poner una buena capa de bálsamo labial para tenerlos bien hidratados.

Su precio oscila entre los 7,99€ y los 8,99€ y se pueden encontrar en tiendas físicas como El Corte Inglés u online Primor y Maquillalia, aunque no todos los colores están disponibles. 

Y vosotras ¿habéis probado estos labiales?

Edito. Después de escribir el post me acordé de un truquillo que usaba cuando me dedicaba a la estética y es una vez aplicado el labial mordemos suavemente un pañuelo de papel y con el dedo ayudamos a asentar mejor el color. De este modo los tonos quedan más suaves y el 45, Escapist, queda un morado precioso que ya puedo usar a diario sin parecer una muerta.